El Instituto de Investigación del Desarrollo (DRI), fundado en 2006, dedica su actividad a investigar el crecimiento económico de los países en vías de desarrollo y asesorar a las organizaciones dedicadas a la cooperación.
La labor del DRI se caracteriza por su visión renovadora del análisis de la ayuda al desarrollo y por contribuir a una mejor utilización de las aportaciones económicas de los países ricos a las naciones en vías de desarrollo. En concreto, los resultados de sus análisis contradicen algunas creencias arraigadas en la ayuda al desarrollo, como la que determina que un mayor aporte económico por parte de los países ricos conlleva necesariamente un mayor desarrollo en el país receptor de la ayuda.
El DRI está codirigido por los profesores de Economía de la Universidad de Nueva York William Easterly (Morgan Town, Virginia Occidental, Estados Unidos; 1957) y Yaw Nyarko (Accra, Ghana; 1960). Easterly es doctor en Economía por el Instituto Tecnológico de Massachussets y experto en política económica del desarrollo y en estudio de la eficacia de la cooperación internacional. Ha desarrollado su labor en numerosos países y regiones en vías de desarrollo, especialmente en África, América Latina y Rusia. Por su parte, Nyarko, está considerado uno de los principales economistas teóricos de origen africano, es director adjunto del ‘Journal of Economic Theory’, y consultor para el Banco Mundial y Naciones Unidas.
Discurso
Cooperación al Desarrollo, II edición
Encontrar un medio para estimular la ayuda a los países más deprimidos económicamente, con incidencia especial en los del continente africano, y articular el modo de distribuir esa ayuda eficazmente, llegando a poner para ello en tela de juicio algunos procedimientos y vías ineficaces desde el punto de vista práctico. Esas fueron las dos premisas que movieron a Yaw Nyarko y William Easterly, profesores ambos de la Universidad de Nueva York, a crear en 2003 el Development Research Institute (DRI) que codirigen, y cuya labor reconoce el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento 2009 en su categoría de Cooperación al Desarrollo.
Como primer paso para conseguir sus objetivos
Easterly y Nyarko, rechazando los modelos que tradicionalmente se habían aplicado sin resultados favorables, decidieron implementar los sistemas de investigación más avanzados en el terreno económico y social. Con esa metodología pusieron en evidencia, y posteriormente elevaron a categoría de denuncia, los problemas asociados a la pobreza en los países más deprimidos, con especial virulencia en determinadas áreas geográficas del mundo. De ese modo surgió el DRI, vinculado estrechamente con Africa House, institución interdisciplinar fundada y dirigida por Nyarko, cuyo cometido se centra en el estudio de los temas relacionados con el África contemporánea, tanto en el aspecto del derecho, la economía y la política como en el de las artes.
Concebido desde sus orígenes como una organización no gubernamental, el DRI, a través de sus propias publicaciones, comparecencias en distintos foros y apariciones en numerosos medios de comunicación, ha llegado a captar el interés de gran número de investigadores/ras de distintas disciplinas, cuya cifra crece año a año. Del mismo modo aumenta el conjunto de alumnos/nas que trabaja junto a ellos: un colectivo en el que destaca, como hecho nada habitual, la presencia de una importante representación de estudiantes llegados de distintos puntos de África. Entre todos se encargan de materializar uno de los objetivos fijados por Easterly y Nyarko: involucrar al mundo académico y al público en general en la búsqueda de soluciones eficaces para luchar contra la pobreza en el planeta.
De entre la serie de iniciativas puestas en marcha destaca como instrumento único de supervisión el Aid Watch, basado en el convencimiento de que, cuantos más ojos sean los que detectan las necesidades, mayor será el número de personas que puedan obtener ayudas. Filosofía que se resume en dos pensamientos, elevados por el DRI a categoría de axiomas. En primer lugar, una reflexión del periodista estadounidense Henry Louis Mencken quien, por la influencia que ejerció su palabra en la sociedad americana de la primera mitad del siglo xx, fue conocido como el Sabio de Baltimore. Dijo: “La conciencia es la voz interior que nos advierte que alguien puede estar mirando». La otra corresponde a Louis Dembitz Brandeis, nacido en 1856 en Louisville, que llegaría a ocupar el cargo de ministro de la Corte Suprema de Justicia. Brandeis, después de afirmar que veía en la publicidad el vehículo perfecto para remediar las enfermedades sociales e industriales, añadió: «Se dice que la luz del sol es el mejor de los desinfectantes y la luz eléctrica el policía más eficaz”.
Detectar los problemas existentes y sacarlos a la superficie
Ha sido vital la implementación desde 2009, a través de Internet, del Aid Watch Blog, plataforma al alcance de quien se considere copartícipe de las reflexiones de Nyarko y Easterly. La iniciativa ha despertado tal interés, que ya en su primer año recibió más de trescientas mil visitas procedentes de doscientos ocho países, aportando ideas o buscando respuesta a interrogantes como la que se planteaba Easterly en uno de sus trabajos: ‘¿Adónde va el dinero?’ Porque si es cierto que son muchos los que intentan con sus aportaciones mitigar la pobreza –desde grandes organismos como el Banco Mundial a ciudadanos anónimos de todo el mundo pasando por un sinfín de organizaciones no gubernamentales–, también lo es que hace falta articular mecanismos que faciliten el modo de rendir cuentas de sus servicios a quienes manejan los canales de distribución. De lo contrario, de aplicarse con arbitrariedad, se vería dañada la eficacia del sistema, pudiendo incluso volverse contra él: precisamente lo que pretende evitar Aid Watch al brindar procedimientos de control fiables, con el respaldo del DRI como referente idóneo a la hora de aportar transparencia en la gestión.