Los XVI Premios Fronteras han recaído en los matemáticos Claire Voisin y Yakov Eliashberg en Ciencias Básicas; Ulrich Hartl, Arthur Horwich, Kazutoshi Mori y Peter Walter en Biología y Biomedicina; Takeo Kanade en Tecnologías de la Información y la Comunicación; Gerardo Ceballos y Rodolfo Dirzo en Ecología y Biología de la Conservación; Dorthe Dahl-Jensen, Jean Jouzel, Valérie Masson-Delmotte, Jakob Schwander y Thomas Stocker en Cambio Climático; Partha Dasgupta en Economía, Finanzas y Gestión de Empresas;  Elke Weber en Humanidades y Ciencias Sociales; y el compositor británico George Benjamin, en Música y Ópera.

La Orquesta Sinfónica de Madrid, bajo la dirección de Santiago Serrate, desarrollará un programa cuya primera parte ofrece la interpretación, por primera vez en España, del Concierto para orquesta de George Benjamin, así como Dance Figures, del mismo autor; y que se cierra con la Suite de «El pájaro de fuego», de Igor Stravinski, y Preludio y Muerte de amor, de la ópera Tristán e Isolda de Richard Wagner.

Concierto para orquesta es la penúltima obra escrita hasta el momento por el galardonado en Música y Ópera en esta edición de los premios y está intensamente vinculada al fallecimiento del también compositor Oliver Knussen, con quien compartía una estrecha amistad desde los 18 años. En esta obra Benjamin intenta evocar, según afirma, “un rastro de la energía, el humor y el espíritu que asocio con mi amigo y su estado de ánimo, a menudo divertido, aunque en ocasiones se torciera hacia un terreno mucho más turbulento”. Por eso, la obra serpentea por una diversidad de sugerencias instrumentales que interactúan y se superponen, como explica el compositor: “Líneas largas y suspendidas que tejen un camino a través de texturas contrastantes, algunas rápidas y asustadizas, otras más dinámicas y propulsoras. Todos los instrumentos desempeñan múltiples roles, tanto dramáticos como sonoros, en toda la estructura, entre ellos una volátil tuba solista, elaborados dúos de trompetas, clarinetes burbujeantes y dos pares de timbales retumbantes. Los más destacados de todos son los apasionados primeros violines, quienes casi tienen la última palabra durante la tranquila conclusión de la obra”.

A continuación, se ofrecerá Dance Figures, la primera obra de Benjamin de carácter coreográfico, aunque se estrenó en versión de concierto, es decir, tal y como se escuchará en esta ocasión. Fue escrita para que la coreografiara Anne Teresa De Keersmaeker, una figura de referencia en la danza contemporánea, y consta de nueve movimientos breves que se interpretan casi sin interrupción y contrastan fuertemente entre sí en carácter, forma y color instrumental.

Exotismo, fuerza e intensidad son rasgos propios de la Suite de «El pájaro de fuego», que en el concierto se interpretará en la versión que Ígor Stravinski escribió en 1919 en la ciudad suiza de Morges, lugar de encuentro con músicos como el director de orquesta Ernest Ansermet, que la estrenaría poco después. George Benjamin —de quien el jurado del Premio Fronteras destacó su “lenguaje musical muy personal y reconocible”—  ha dicho, a su vez, de Stravinski que “posee un universo sonoro e instrumental absolutamente singular y único, sin relación con otras partituras propias y ajenas”.

La velada se cierra con Preludio y Muerte de amor, el comienzo y el final de Tristán e Isolda, de Richard Wagner. El compositor alemán describió en una carta a su suegro, Franz Liszt, el propósito de la obra, que musical y expresivamente se condensa en su principio y final: “En mi existencia jamás he disfrutado de la auténtica dicha del amor; así que quiero ahora elevar al más bello de todos los sueños un monumento donde, desde el principio hasta el fin, se sacie plenamente este amor”.

Conectar con el público sin renunciar a una factura musical rigurosa y detallista

El compositor y director de orquesta George Benjamin recibe el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en Música y Ópera por “su extraordinaria aportación y su impacto en la creación contemporánea en los ámbitos de la música sinfónica, la ópera y la música de cámara”. Sus cuatro óperas, que han alcanzado éxito mundial y todas en colaboración con el dramaturgo Martin Crimp, “proponen nuevas estructuras narrativas y mantienen una dramaturgia que conecta y conmueve al público del siglo XXI”, según destaca el jurado. Alumno destacado de Olivier Messiaen, que le definió como “el músico más importante desde Mozart”, fue el compositor más joven en estrenar en los BBC Proms de Londres; su música se ha presentado por las orquestas e instituciones más importantes del mundo. “La ópera impacta y provoca una profunda resonancia en las cosas que son importantes para nuestro mundo. Nos enfrentamos a grandes retos, casi aterradores, pero la música puede llegar al corazón de la gente de un modo diferente a cualquier otra cosa. Lo que me guía es componer algo que quizás permanezca y abra un pensamiento nuevo y significativo”, asegura el premiado.

El compositor ha logrado —son, de nuevo, palabras del acta— “comunicar con el público de manera directa, sin renunciar a una factura rigurosa y detallista en todos los aspectos compositivos, destacando especialmente su dominio de la orquestación, la tímbrica y una arquitectura de la forma impecable”.

En su obra para orquesta y coro Dream of the Song Benjamin muestra parte de la influencia que que la cultura española ha ejercido en él: “En esa pieza no sólo hay poemas de Federico García Lorca —cuya casa visité en Granada la primera vez que fui y cuyo piano toqué—, sino también hay textos basados en poesía hebrea del siglo XI de Andalucía, una poesía de una modernidad y belleza extraordinarias”. Sus vínculos con España son, según destaca, profundos, “Es un país que me encanta, he estado muchas veces y en muchas regiones diferentes. Mi primera experiencia profesional allí fue en Barcelona, donde alguien que ha seguido siendo un amigo muy querido y un fiel defensor de mi música, Josep Pons (actual director musical del Gran Teatre del Liceu de Barcelona), me invitó a dirigir la Orquesta de Cámara del Teatro Lliure de Barcelona. También me invitó a dirigir la Orquesta Ciudad de Granada, y eso me dio la emocionante oportunidad de ver el que quizá sea el lugar más hermoso de Europa, que es la Alhambra. He estado dos o tres veces desde entonces. Sigue siendo para mí una joya absoluta de la Corona de nuestro continente”.

George Benjamin

Empezó a componer a la edad de siete años. En 1976 ingresó en el Conservatorio de París para estudiar con Olivier Messiaen y completó su formación con Alexander Goehr en King’s College, en Cambridge. A la edad de 20 años, y mientras aún era estudiante, se convirtió en el compositor vivo más joven con una obra interpretada en los Proms, pues en agosto de 1980 se programó Ringed by the Flat Horizon. En 1987, sin haber cumplido los 30, el Instituto de Investigación y Coordinación Acústica y Musical (IRCAM por sus siglas en francés) le encargó Antara para celebrar el décimo aniversario del Centro Pompidou, mientras que Three Inventions for chamber orchestra fue escrita un lustro después para conmemorar la 75 edición del Festival de Salzburgo. Directores como Simon Rattle o Pierre Boulez han estrenado obras suyas (At First Light  y Palimpsests, respectivamente) .

Ha compuesto más de 30 obras: cuatro óperas —la primera de las cuales, Into the Little Hill fue un encargo del Festival de Otoño de París—, seis piezas para orquesta y cuatro para solista y orquesta, así como partituras para orquesta de cámara, ensemble, música de cámara e instrumental, y electrónica. Auditorios y orquestas de todo el mundo le han dedicado ciclos, entre ellos la Ópera de la Bastilla de París, la Ciudad de la Ópera de Tokio, la Fundación Filarmónica de Berlín y la Orquesta y Coro Nacionales de España. Como director de orquesta, su repertorio incluye desde Mozart y Schumann hasta Knussen y Abrahamsen y ha llevado a cabo el estreno mundial de numerosas obras, incluyendo piezas de Wolfgang Rihm, Unsuk Chin, Gérard Grisey y György Ligeti. Desde 2001 desempeña la Cátedra de Composición Henry Purcell en King‘s College London.

Orquesta Sinfónica de Madrid

Fundada en 1903, la Orquesta Sinfónica de Madrid (OSM) fue dirigida durante tres décadas por Enrique Fernández Arbós, etapa en la también ocuparon el podio figuras de la talla de Richard Strauss e Ígor Stravinski. En los años 80 pasó a ser la orquesta estable de todos los espectáculos del Teatro de la Zarzuela y comenzó el ciclo anual de conciertos en el Auditorio Nacional de Música que sigue ininterrumpidamente hasta hoy. Desde 1997 es la Orquesta Titular del Teatro Real, etapa en la que ha contado con la dirección musical de Luis Antonio García Navarro, Jesús López Cobos y, actualmente, Ivor Bolton, junto con Pablo Heras-Casado y Nicola Luisotti como principales directores invitados. El Teatro Real fue galardonado en los International Opera Awards como mejor teatro de ópera del mundo del año 2019, siendo la OSM su orquesta titular.

En su discografía destacan las zarzuelas y óperas españolas grabadas para Auvidis, la integral de las sinfonías de Felix Mendelssohn, bajo la dirección de Peter Maag, para Arts, y las primeras grabaciones mundiales de Merlin y Henry Clifford de Isaac Albéniz dirigidas por José de Eusebio, para Decca. Una parte significativa de sus actuaciones en el Teatro Real está siendo publicada tanto en disco como en DVD.

Santiago Serrate

Santiago Serrate ha dirigido, entre otros coliseos, en el Gran Teatre del Liceu de Barcelona, Teatro Real y Teatro de la Zarzuela de Madrid, el ciclo Òpera a Catalunya, Palau de Les Arts de Valencia, Teatro de la Maestranza de Sevilla, Theater Chemnitz (Alemania) y con el Ballet de l’Opéra de Lyon (Francia). Ha dirigido los estrenos en España de Šárka de Janáček, Il prigioniero de Dallapiccola o la recuperación del Cristoforo Colombo de Ramón Carnicer. Ha estrenado mundialmente en versión de concierto y grabado, gracias a una Beca Leonardo de la Fundación BBVA, la ópera Tenorio de Tomás Marco, y en mayo de 2024 ha dirigido su estreno absoluto escénico en el Teatro Real de Madrid. Ha estrenado la ópera Fuenteovejuna de Jorge Muñiz para la Ópera de Oviedo, que recientemente se ha repuesto en la Ópera de Tenerife.

En total, cuenta en su haber con más de ciento veinte estrenos mundiales y cuarenta nacionales. Su repertorio operístico incluye más de setenta títulos.Es profesor de Concertación de la Cátedra de Canto Alfredo Kraus Fundación Ramón Areces, y mecenas de instrumento de la Escuela Superior de Música Reina Sofía, profesor en el Centro Superior de Música Liceu de Barcelona y mentor de la «Generación Talento», de la Fundación Princesa de Girona. Actualmente, es el director de la Temporada de Música 2023-2024 de la Fundación BBVA.