Ordenadores cuánticos, la Amazonia y su grito contra la deforestación, la lucha contra el cáncer, la cooperación internacional, la crisis económica, el deshielo del Ártico… La ceremonia de entrega de la edición inaugural de los Premios Fronteras del Conocimiento de la Fundación BBVA, celebrada la tarde de hoy en la sede de la Fundación en Madrid, ha supuesto un viaje por los avances de la ciencia y sus desafíos. La emoción del descubrimiento, el valor de la investigación básica y, en general, la belleza de la curiosidad y de la creatividad humana han sido elementos presentes en el mensaje de todos los galardonados.

La ceremonia, presidida por la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, el presidente de la Fundación BBVA, Francisco González, y el presidente del CSIC, Rafael Rodrigo, ha congregado a destacados representantes de la comunidad científica internacional y de las altas instituciones del Estado, así como a personalidades del mundo de la cultura y la empresa.

La celebración se ha convertido en la presentación internacional de unos galardones que se sitúan entre los más importantes del mundo, dada la amplitud de disciplinas cubiertas, su carácter internacional, el rigor en la selección de los galardonados y la dotación económica –un total de 3,2 millones de euros. A su primera edición han concurrido instituciones e investigadores de más de treinta países.

“Son premios que llevan el sello de este siglo”

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“Estos Premios quieren estimular la excelencia en los campos del conocimiento más característicos de la sociedad global del siglo XXI”, ha manifestado Francisco González. “Son premios que llevan el sello de este siglo”. Entre las ocho categorías de los Premios Fronteras del Conocimiento figuran las de Cambio Climático, Cooperación al Desarrollo, Tecnologías de la Información y la Comunicación y Ecología y Biología de la Conservación, áreas en las que no existían hasta el momento premios internacionales de relevancia.

El presidente de la Fundación BBVA ha recordado también que el nombre de los premios hace referencia a la interdisciplinariedad en la ciencia y al continuo desplazamiento de los límites del conocimiento. Ha destacado, además, el deseo de la Fundación BBVA de reconocer a personas y equipos capaces de “abrir nuevas vías en nuestro modo de ver el mundo y de actuar en él”, cubriendo así el “déficit de reconocimiento explicito a la comunidad investigadora” que se da en las sociedades actuales.

La ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, se ha referido a la labor de la Fundación BBVA como “un ejemplo de mecenazgo en la promoción de la actividad científica y artística de excelencia y en apoyo a su divulgación social; por ello creo que, en este día, además de los premiados, también la Fundación merece un reconocimiento.” Garmendia ha señalado también en su intervención que “los objetivos comunes de la Fundación BBVA y del Ministerio de Ciencia e Innovación en materia de cultura científica sólo se entienden desde un profundo compromiso democrático: el de hacer a la ciudadanía más partícipe de los resultados de la actividad científica y tecnológica, el de fomentar su participación y el de evidenciar los retornos sociales y económicos de la inversión en estas materias”.

Galardonados

En esta primera edición de los Premios Fronteras del Conocimiento los galardonados han sido Wallace S. Broecker, en Cambio Climático; Ignacio Cirac y Peter Zoller, en Ciencias Básicas; Joan Massagué, en Biomedicina; Thomas E. Lovejoy y William F. Laurance, en Ecología y Biología de la Conservación; Jacob Ziv, en Tecnologías de la Información y la Comunicación; Jean Tirole, en Economía, Finanzas y Gestión de Empresas; Steven Holl, en Artes; y el Laboratorio de Acción contra la Pobreza Abdul Latif Jameel (MIT), en Cooperación al Desarrollo.

Todos ellos han recibido un símbolo artístico obra de la escultora Blanca Muñoz (Madrid, 1963), basado en varias espirales que representan la evolución e interrelación de las disciplinas científicas. La espiral, explica la autora, “es la mejor solución para crecer en poco espacio y la mejor forma para representar la continuidad”.

En los breves discursos pronunciados en el transcurso de la ceremonia, los galardonados han dado testimonio de la riqueza del conocimiento acumulado hasta el momento por la humanidad, pero también de los grandes retos nos depara el futuro y de su fascinación ante lo que queda por descubrir.

“El conocimiento es el tesoro de la humanidad”

“Mi carrera comenzó cuando, siendo un adolescente quedé fascinado por un libro de divulgación sobre Guillermo Marconi”, ha confesado Jacob Ziv, el mayor de los galardonados.

“Fui lo bastante ingenuo como para pensar que podía construir mi propio transmisor siguiendo los esquemas del transmisor de Marconi”.

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Marconi fue, para Ziv, el iniciador de su propia área de investigación, la Teoría de la Información, al descubrir la telegrafía sin hilos a finales del siglo XIX.

Peter Zoller e Ignacio Cirac, por su parte, se sienten “representantes de la comunidad científica que trabaja en ciencias básicas, (…) que trata de entender la naturaleza, de descubrir nuevos fenómenos y de encontrar la forma de observarlos”. Ambos físicos pertenecen a un “área emergente que investiga el extraordinario comportamiento de las partículas microscópicas (…), y que ilustra cómo la ciencia básica, además de alimentar nuestra curiosidad y enriquecer nuestro conocimiento, puede generar a largo plazo importantes aplicaciones”.

Joan Massagué, por su parte, ha recordado uno de los grandes desafíos actuales: “El conocimiento es el tesoro de la humanidad, especialmente ante los retos que nos depara nuestra época. Retos como la conquista del cáncer, una de las enfermedades con mayor impacto sobre nuestras vidas. Como partícipe, tengo la firme convicción de que la comunidad de científicos y médicos va a alcanzar esta meta en las próximas décadas. De hecho, la conquista ha comenzado ya”.

Transmitir a los jóvenes la emoción de descubrir

Otro mensaje subrayado repetidas veces a lo largo de la ceremonia ha sido la importancia de que la emoción de descubrir se transmita a los más jóvenes. En palabras de Jean Tirole, “con estos galardones la Fundación BBVA reconoce la importancia de la investigación para el futuro de la sociedad.

“La Fundación anima así a nuevos jóvenes talentos a que emprendan carreras científicas, tan necesarias para hacer frente a los actuales desafíos tecnológicos, económicos y políticos”.

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Francisco González ha destacado además la labor de los jurados, cuyo “elevado perfil de excelencia” ha hecho posible “un proceso objetivo y riguroso”. La Fundación BBVA ha contado con la colaboración del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para la preselección de candidaturas y designación de los miembros de los ocho jurados -investigadores y personalidades del mundo académico, cultural o económico de gran prestigio internacional, entre ellos varios premios Nobel.

La ceremonia, presentada por la periodista Beatriz Ariño, se ha abierto y clausurado con dos piezas musicales, de Joaquín Turina (1882-1949) y Jesús Torres (1965), interpretadas por el Trío Arbós.